PASO A PASO CUMPLEAÑOS SÁNDWICHES

PASO A PASO CUMPLEAÑOS SÁNDWICHES

Por: Rosario Greene

Me tomé un par de semanas pero ¡Acá va lo prometido! En este post podrán encontrar los datos, tips, recetas e ideas que desarrollé para la celebración de mi cumpleaños.

El concepto que elegimos para la comida fueron : Sandwiches “listos” y para el aperitivo: Naturaleza en verduras. (Hablo en plural porque todo lo hice de la mano de mi madre: Juntas pensamos la idea y la llevamos a cabo). 

Aperitivo:

Como el fondo eran panes de diferentes tipos, para el aperitivo pensamos en algo liviano y natural. Por eso la temática fue: Variedad de verduras y explosión de color con la sola presencia de ellas. Para lograr esto fue clave ir a la Feria. No quiero desmerecer las verduras del supermercado, pero la calidad y la variedad es inigualable con las verduras de feria. Fuimos a la Vega y ahí compramos las verduras para el aperitivo y también la decoración.

           

Tablas de verduras frías: Lo más importante era la variedad de colores: Con los pimentones obtuvimos el amarillo y el rojo. Con los champiñones y la coliflor, el blanco. Con los rábanos, el fucsia. Con las zanahorias, el naranjo. Con los apios, zapallo italiano y brócoli, el verde claro y verde oscuro.

Y para resaltar lo natural, pusimos la salsa para untar las verduras en fuentes “naturales”: Ahuecamos un repollo morado y los pimentones de tres colores fueron nuestros súper bowls para poner crema ácida, yogurt natural y cibulette. Creo que esto visualmente encantó a todos. Era una verdadera explosión de colores naturales que invitaba a sacar uno tras otro.

Junto con esto quisimos hacer algunos aperitivos, también en torno a verduras, pero un poco más sofisticados para sorprender a los paladares. Siguiendo con la tónica de aperitivos naturales hicimos:

Endivias rellenas con queso azul, nuez y aceite de oliva. Una mezcla deliciosa de sabores y crunch.

    

Potos de alcachofas rellenos con ricota, crema ácida, ciboulette y aceite de oliva.

Brochetas de queso gruyere con jamón serrano y tomate cherry. (El jamón serrano y el queso lo compramos en Arturito, (La Vega): Comprar el despunte que es más barato y viene trozado listo para servir.

Y esto lo dejo para el final porque fueron sin duda los que todos se pelearon y los más sorprendentes: Higos cortados en cuatro rellenos con queso azul, ricota y jamón serrano. Un manjar literalmente la combinación dulce del higo con el sabor fuerte del queso azul.

     

Para armar todo esto seguimos con la línea natural y los presentamos con decoración ad hock. Compramos verduras para decorar. Hinojos que por su olor y presencia llaman la atención y los pusimos tal cual en medio de la fuente de los potos de alcachofas y endivias.

Lo mismo hicimos con castañas. Compramos varias y las pusimos al centro de los higos para darle un toque más natural y salvaje. Hicimos una gran bandeja de higos decorada con pétalos. Recogimos hojas fucsias de una buganvilia y las dispusimos alrededor de los higos. Quedó increíble y combinaba perfecto con el interior del higo.

      

Sándwich:

La clave del éxito visual fue tenerlos listos. Es algo que sin duda da mucho más trabajo, pero que estéticamente es tanto más lindo, que valía la pena. El trabajo previo es muchísimo mayor, pero el trabajo posterior se aliviana, ya que no se ensucia nada.

Los panes los compré en el Líder. Recorrí harto antes, pero para sándwich de este tipo (no tapaditos) es una buena opción la panadería del Líder. Ir pasado el medio día porque ahí sale la gran variedad de panes. Obviamente deben ser frescos: del mismo día.

Compré para simplificar la vida 4 tipos de panes, ya que íbamos a trabajar con una variedad de 4 tipos de sándwiches.

  1. Carne mechada en pan de cebolla con mayonesa, palta molida y cebolla caramelizada. (La clave es cortar la cebolla en corte pluma y dorarla con un poco de azúcar rubia y mantequilla hasta que cambie de color y quede 100% dorada).

  1. Salmón ahumado en pan croissant con ricota, queso filadelfia y rúcula. (La clave es hacer una pasta que junte los ingredientes blancos: antes de untar con el pan mezclar la ricota, el filadelfia y crema ácida. Este trío le da un sabor delicioso como base del pan.
  2. Jamón Serrano en pan italiano con queso mantecoso, tomate, albahaca y mayonesa. Acá la clave fue no poner queso laminado, sino comprar un buen trozo y cortarlo medianamente grueso. Muy importante sacarle la grasa al jamón serrano para poder cortarlo con los dientes y que sea un pan amigable a la hora de morderlo.

Pollo con chutney de mango, mayonesa y hojas finas de lechuga. Acá la clave fue hacer una pasta con el pollo una vez cocido y desmenuzado junto con la mayonesa y el chutney de mango que le dio un toque agridulce exquisito. El chutney se compra listo en los grandes supermercados. (Es un frasco como el de una mermelada).

Datos importantes: El salmón, jamón serrano y el queso los compramos también en La Vega. Es mucho más barato y la calidad buenísima. (En quesos Arturito todo y el salmón en un puesto en el pasillo entrando a la derecha donde vendían puras cosas de mar).El broche de oro y que llamó mucho la atención de los sándwich fue presentarlos tal y como los sirven cuando vas a una sandwichería: envuelto en papel encerado. Ese papel que al verlo te hace salivar porque sabes que dentro viene una rica hamburguesa o un delicioso sándwich. Los compré en Casa Ideas: Papel encerado. Venían de a 100 y valían $1.600. Además esto tuvo un efecto secundario no buscado que fue maravilloso: Nadie ocupó platos, solo servilletas.

Postres: Para los postres quisimos seguir con el mismo concepto y montarlos acompañados de una decoración natural. Creo que decorar con frutas y verduras es un gran acierto y funciona bien para muchísimas ocasiones. Es una decoración que no es cara, que no dura, pero que tiene una gran utilidad y beneficio evidente: una vez terminada la celebración puedes comértela. Además es algo muy fácil de poner y de que te quede bien. Hay mucha gente que le da susto decorar y prefiere no hacerlo por temor a que le quede “mal logrado”. Esto es una súper buena opción para enfrentar ese mito.

        

Aquí les dejamos las frutas que compramos para el montaje: Piñas, maquis (color naranjo), granadas: algunas las pusimos cerradas y otras abiertas en cuatro para que se viera la preciosura de su interior, pomelos, naranjas y hojas verdes de árboles para acompañar algunas frutas.

Hicimos también una gran fuente de fruta en medio de los postres, fruta “cerrada”, que no era para comer, sino para dar color y ambientar.

Ideas para el montaje – ambientación:

  • Otra cosa simple y que visualmente encantó fueron la manera de presentar las uvas. En un palo largo de brocheta poner una a una las uvas solas. Luego presentarlas en un florero de vidrio para que se aprecien.

  • “Tablas” de postre: Estamos acostumbrado a armar tablas de aperitivo, pero no es tan común ver “tablas de postre”. Hicimos dos tablas con variedad de frutas (ahora sí picadas listas para comer y con mondadientes igual como si fueran quesos) y mezclamos con chocolate y galletas entremedio. Acompañamos de pétalos de flores para el toque final y el resultado nos encantó.

  • Y por último y creo que fue la guinda de la torta: los conos de helado rellenos con berries. Compré los conos y cobertura de chocolate que derretí a baño maría y los decoré con esa capa de chocolate tal como se ve en la foto. Hay que esperar que se seque para que no se ensucie el cono, el secado es súper rápido. Y luego adentro le puse frutillas, frambuesas y arándanos frescos. Sobre eso pincelé un poco de chocolate derretido y decorar con una ramita de menta para otorgar el color verde. La gente los agarraba y se los devoraba igual como si fuera un delicioso helado.