Norte Brasil en Familia

Norte Brasil en Familia

Fortaleza- Jericoacoara- Porto do Galhinas


FORTALEZA


Siempre me piden los datos de los viajes los amigos así que los dejo escrito acá para que sea fácil para todos leerlo cuando necesiten.

Este viaje fue siempre pensado con niños. Nos fuimos un sábado y volvimos un martes. 18 días en total incluidos los días de viajes. Edades de los niños: Santi 12, Matilde 10, Amelia casi 7 y Eloísa 3.  

 

           

          

Siempre llegar a estos lugares es ajetreado, por eso venirse harto tiempo es buena opción. 

Volamos hacia São Paulo (4 horas) Luego cambiamos de avión y de maletas. Y otro avión hasta Fortaleza (4 horas más). Ahí nos estaba esperando un auto que nos llevó del aeropuerto a nuestro Depto-Hotel que está ubicado al lado del Parque de agua de Fortaleza. La verdad nosotros no elegimos Fortaleza como destino, pero es parada obligatoria para Jericoacoara que ése era uno de los lugares que sí elegimos. Y en vista de que llegábamos para allá, nos habían comentado que ahí está uno de los Parques de agua más grandes de Brasil. Por eso pasamos por ahí y la verdad es que tal cual! El parque era espectacular. Enorme y repleto de juegos para grandes, chicos y medianos. Los juegos se prenden a las 11 am y se apagan a las 17 horas, pero es bueno llegar antes tipo 10:30 porque abren más temprano y puedes pillarte un lugar para dejar toallas como lugar de encuentro. Nosotros nos instalamos al frente de un restorán y les explicamos a los niños para que, cualquiera que se perdiera, se fuera al lugar de encuentro y funcionó muy bien.

Otro dato: Arrendar un locker para dejar billetera, celulares, mochila, etc. Para así estar tranquilo en los juegos de agua. Realmente entretenido y espectacular. ¡Los niños no se querían ir! Venden de todo adentro para almorzar y comer. Incluido flotador por si no quieren llevar.

      
La playa de Fortaleza también merece ser mencionada porque fuimos sin ninguna expectativa y fue realmente una sorpresa.

Muy entretenida para bañarse. Mar fuerte eso sí, pero rico para los más grandes y capeo de olas.


      

JERICOACOARA


Luego partimos a Jericoacoara (Jeri) en auto. Cinco horas desde nuestro departamento en Fortaleza. En Jeri nos quedamos 7 noches. Arrendamos una casa realmente espectacular. ¡Un verdadero acierto! Preciosa, grande, ni hablar de lo bien decorada y llena de detalles. Piscina, parrilla, de todo. Lo más cómodo es que incluye un desayuno continental espectacular que te lo vienen a preparar a la casa y el aseo y mantencion diario de la casa. ¡Es muy cómodo y rico eso! Se llama "Aldeia Jericoacoara" la casa.  (Y nosotros la reservamos por Booking) Y es como un condominio que está en Jeri mismo, A 300 metros de la playa.

        

       

 

Jeri es un pueblo chico y acá todo es muy cerca y caminable. 

Acá no arrendamos auto porque todo es de arena. Entonces te puedes mover en moto de cuatro ruedas, Buggie o una camioneta con tracción. Pero para arrendar realmente tienes que conocer el lugar para moverte. Nosotras contratábamos todos los paseos diarios con diferentes agencias y eso fue lo mejor. Porque así, personas que conocen en lugar y saben manejar sobre arena lo hacen. 

 

 

Les dejo los lugares más entretenidos y lindos que fuimos. 

1. Praia do prea: Nosotros no nos instalamos. Es parada del paseo del lado este. Así que ahí nos sacamos unas fotos lindas con el letrero y sería. Es la playa del kite surf y de mucho deporte acuático ventoso. Pero si alguien quiere instalarse hay restoranes y de todo ahí. Es súper ventosa. Vale lapena verla porque es grande y es donde ves todos los kite surf en su esplendor. Pero para instalarse con niños es muy ventosa.

  


2. Buraco azul: se paga entrada. Es para ir a nadar pero no para instalarse. 20 reales los adultos y 10 los niños grandes. A mis niños les encantó porque tiene una piedra de la que te pueden tirar con unos cuantos metros de altura que es súper entretenido. No es cómodo para instalarse el día completo, pero recomiendo conocerlo, nadar un rato y disfrutar de ese piquero desde la roca. Todos estos lugares tienen restoranes donde comprar algo para tomar y comer.

    
      

3. Laguna azul: Laguna Dulce natural que se forma por las lluvias. Tiene hamacas colgando en el mar y tiene un restorán con mesas y sillas que almuerzas literal en el agua. Muy rico. Entrada 30 reales por persona. Aquí pagan sólo mayores de 10 años. Es un lugar rico para instalarse. Se puede nadar tranquilamente porque no hay olas.

    
    



4. Laguna do Paraíso: También una laguna natural hecha por lluvia. La llegada es maravillosa en una playa muy Virgen. Ahí paramos a sacarnos unas fotos. Y luego hay un Beach Club para instalarse que se llama Alquimist. Que tiene camas, reposeras y todo muy rico. La comida también deliciosa y frente a la laguna. Que tiene las hamacas. Además tiene unos juegos inflables de niños que vienen incluidos en la entrada que pagas al momento de entrar. La entrada vale 35 reales por persona. Los juegos son para mayores de 6 años. Si se alejan de los juegos de agua mirando el mar hacia la derecha la playa se transforma en un lugar completamente virgen. Arena imposible más blanca. Es realmente lindo caminar por ahí.

    
    

5. Piedra Furada: Se puede ir caminando, pero con niños no recomendado. En el pueblo hay unas carretitas de madera con caballos que te llevan. Nos cobraron 120 reales por las dos carretas. A los niños les encantó este paseo. Llegas en 15 minutos y ahí bajas una mini quebrada caminando y te encuentras con una playa muy sola y linda. Y fotogénica. Está la piedra que es realmente linda.  Vale la pena ir al atardecer porque el colorido es precioso y la vuelta en carreta por ese valle con el cielo naranjo es realmente lindo.

  

  



6. Lago do Manso: Ir sí o sí a la hora del sunset. Llegas en buggie o camioneta. Se puede arrendar ahí toda la movilización. Vale realmente la pena ir a las dunas a partir de las 16.30 en adelante. Baja el sol y los paisajes son alucinantes. Los niños corren y juegan por las dunas inmensas. Mucha gente para ahí a ver la puesta de sol, pero la dunas son tantas y tan gigantes que hay espacios para todos.

 
 

7. Playa de Jericoacoara: La playa misma de Jeri en sí no es tan tan rica. Pero sí o sí recomiendo ir de mañana temprano porque es marea baja y es un espectáculo. A partir de las 10 y hasta tipo 12 pasa esto: La marea baja una brutalidad y es muy muy choro. Los barcos quedan sobre la arena. La gente arma pichanga de fútbol donde en unas horas después se puede nadar. Es lindo lindo. Si tienen opción de arrendar bicicleta háganlo de todas maneras. En nuestra casa tiene incluidas las bicicletas (esas con las ruedas gordas) pero en el pueblo se arriendan. Ahí salir en la mañana y partir desde la playa de Jeri mirando el mar hacia la izquierda. Unos 5 kilómetros hacia allá se junta con un mini río y es un paseo maravilloso. La playa es virgen, cristalina y tan blanca que te encandila. Ahí no hay literalmente nadie. Solo te topas con uno que otro buggie o algún caminante motivado. Es alucinante ese spot tan inmenso y tan vacío.


    




8. Qué nos quedó pendiente por conocer y no pudimos porque habían manifestaciones y estaba cerrado el camino lamentablemente: Paseo hacia el lado Oeste de Jeri: La famosa tiroleza sobre dunas que caes sobre una laguna y el cruce en balza.

Jeri nos encantó muchísimo por su estilo. Un lugar muy poco pretensioso y sofisticado. Donde no hay calles, sino arenas y dunas, donde te encuentras con burros, lagunas naturales y playas extensas y vacías. El pueblito es muy entretenido de noche. Siempre recorrerlo completo porque hay varias callecitas ocultas con tiendas preciosas una al lado de la otra. Lleno de restoranes ricos. Al final del pueblo cuando llegas a la plaza y finalmente al mar hay carritos donde puedes hacerte jugos naturales, helados, frutas y tragos ricos que te hacen ahí al momento. Además venden camarones gigantes  y quesos en las brazas. El mejor restorán que fuimos acá fue justamente ahí. en la calle principal, donde se acaba y llegas al mar. Doblas a mano izquierda y ahí caminas saltando una que otra ola de la marea que a veces sube y se llama: La Playa, y es un hotel también, pero puedes comer ahí sin problemas. De noche muy lindo porque está lleno de luces, y estás literalmente encima del mar.

      
      


PORTO DO GALHINAS

De Jeri nos fuimos al aeropuerto de Fortaleza (5 horas en auto) y ahí volamos a Recife. Una vez que llegamos a Recife tomas otro auto de una hora más para llegar a Porto do Galhinas. Este destino lo elegimos porque nos habían recomendado mucho como un lugar familiar, con una playa maravillosa para instalarse con poco movimiento. Y fue realmente rico. Sobre todo después de venir de Jericoacoara que nos movimos harto. Acá la idea justamente era descansar y pensar en menos logística. Nos instalamos en el Enotel, un hotel muy rico y súper familiar. (Todo incluido, literal todo todo).
El Hotel en sí fue un acierto y es especialmente pensado para familias con niños: Tiene muchos juegos de agua dentro del hotel, piscinas con olas saladas, bares para tomarse cosas en el agua todo el día, shows nocturnos para niños, recorridos de agua en que vas en flotadores, en fin. Todo pensado para niños. Restoranes tipo buffet a toda hora y en la noche restoranes deliciosos: Francés, mediterráneo, italiano y de pizza. Nos encantó el francés, eso sí era menos de niño. Y el que se llevó todos los créditos fue el de pizzas: Al horno de barro ahí mismo y pizzas dulces y saladas.

    
    

Qué panoramas se pueden hacer desde acá:

1. El Pueblito de Porto do Galhinas:
Queda a 4 kilómetros del Enotel, así que nos fuimos en taxi. Ir sí o sí en la noche. De día no tiene mucha gracia. De noche tiene lucecitas de colores y miles de puestos con artesanías y cosas brasileras. Comida callejera deliciosa: tapiocas, helados de acai, milo caliente, queso caliente, brigadeiros, etc. Se puede comprar ahí callejeando. El pueblito tiene dos entradas, recomiendo caminarlo con tiempo, calma y completo porque hay muchos lugares entretenidos. Tiene un pasaje con puros paraguas arriba y algunas gallinas pintadas muy lindo.

        

2. Recorrer las playas: Este paseo nosotros lo hicimos en buggie y valió muchísimo la pena, porque ya andar en este tipo de auto es una experiencia en sí misma. Los niños gozaron! Arrendamos dos buggies porque éramos 6 (Siempre manejados por locales). Fuimos a:

    -Praia do Cupe: Acá siempre te dejan en el pueblo de las Playas, por lo tanto la tónica del paseo es vivir más la onda brasilera que estar en una playa preciosa solos. Para eso siempre es mejor la playa mima del hotel que es realmenre espectacular. Pero acá había música entretenida,  restoranes, playa para bañarse, heladeros por todas partes, etc.

      

    -Muro Alto: No saltarse esta playa. Lo lindo acá es que hay formaciones rocosas naturales y entre medio se forman lagunas que son increíbles para nadar. La gracia acá fue nadar desde la orilla hasta el otro lado del muro. Además se puede hacer cayac. Siempre con restoranes y mística brasilera.

    


    -Maracaipe: Probablemente de los spot más lindos y brasilero style. Este lugar nos recordó mucho Trancoso. Millones de palmeras por todas partes. La entrada en buggie a este lugar fue un espectáculo. Entre medio de las palmeras que no se acaban nunca y al borde de la playa. Acá hicimos un paseo en bote que nos gustó mucho, porque pudimos ver caballitos de mar que a los niños les encantó. Además el recorrido en ese bote era súper amazónico, mucho más selvático. Ahí nos quedamos hasta ver la puesta de sol. Espectacular!

                    

    -Carneiros: Nosotros no fuimos porque no nos calzaban los días que habían esos tours, pero nos lo recomendaron mucho porque se hace un banco de arena muy grande y hacen paseos en barcos entretenidos. 



Acá les dejo el link de las 5 cosas que fueron claves en este viaje que lo postié en los 5 Tips de un viernes. Creo que vale la pena verlos.
Espero que les sirva y que disfruten tanto este destino como nosotros.